4 sorprendentes usos que le puedes dar a la cáscara de huevo
A menudo solemos tirar algunos materiales o ingredientes sin ser conscientes de los grandes beneficios que estos pueden llegar a tener. Uno de ellos es la cáscara de huevo, que, por lo general, termina en el contenedor de basura y así desperdiciamos su elevado valor nutricional para el hogar y la salud.
Como se sabe, el huevo ha sido catalogado como uno de los alimentos más completos del mundo, ya que contiene una gran cantidad de proteínas, antioxidantes y vitaminas, los cuales contribuyen con importantes beneficios para la salud
Pero ¿sabías que la cáscara también posee un gran valor nutricional? La cáscara de este alimento representa entre el 9% y 12% del peso del huevo, y está compuesta por carbonato de calcio y pequeñas cantidades de carbonato de magnesio y fosfato de calcio, según una investigación Nutrientes del huevo.
Usos a la cáscara de huevo
En ese contexto, en las siguientes líneas te decimos cuatro sorprendentes usos que le puedes dar a la cáscara de huevo.
Fabricar velas
Si eres de los que les gusta hacer manualidades, puedes sacarle provecho a las cáscara de huevo. Eso sí, debes tener cuidado al momento de abrir los huevos duros por arriba para evitar romperlos, puesto que los necesitarás para hacer la base que podrás rellenar con cera.
Posteriormente, inserta la mecha y espera a que se enfríe la cera. Puedes decorar tus nuevas velas a tu gusto con pinturas.
Repelente casero
La cáscara de huevo puede convertirse en tu mejor aliado contra insectos, especialmente, de los caracoles y babosas de tu jardín. Te recomendamos colocarlas alrededor de las flores y plantas para que los animales mencionados no se las coman.
Ollas y cacerolas
Aunque no lo creas, las cáscara de huevo son perfectas para limpiar las ollas, cacerolas y sartenes con restos de comida o grasa pegada. Para este apartado solo tienes que mezclar las cáscaras con agua y jabón y después frotar con mucho cuidado.
Fertilizante y abono
La composición de la cáscara y de carbono de calcio facilita la función de fertilizante para el jardín. Tan solo debes dejar secar las cáscaras, machacarlas y echarlas en el suelo al pie de la planta.
Posteriormente, repartirlas por el césped o en la tierra de la huerta. Es un gran alternativa para aprovechar las propiedades de la cáscara de este alimento y crear un abono económico y natural.
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Fuente: Mag. El Comercio
