La primera granja de gallinas camperas ubicada en el Moncayo, fue proyectada por el colegiado Carlos Pujadas

Milagros Arriazu Pérez solicitó en el año 2019 al colegiado Carlos Pujadas Descartín, que le redactara un proyecto de instalación de gallinas camperas para construirlo en su pueblo, Añón del Moncayo y así poder quedarse a vivir en él. Milagros tiene 35 años, 2 hijos pequeños y definitivamente se ha instalado en Añón, cerca de su lugar de trabajo, una explotación de gallinas camperas, con capacidad para alojar 1620 gallinas y con el acondicionamiento también de un local en el casco urbano, para la clasificación de los huevos y su posterior venta.

Es la primera granja de estas características que se instala en la comarca de Tarazona y el Moncayo.

El proyecto de Pujadas, que es el responsable de la ingeniería Calidad Agroambiental, contempla la instalación de 3 naves aviares móviles prefabricadas, con una superficie construida por nave de 61.44 metros cuadrados. El estiércol procedente de la granja se aplicará como abono orgánico en una finca colindante.

La granja salió indemne del incendio que asoló este verano el pueblo y otros de la zona y quemó más de seiscientas hectáreas. Según confirma Milagros, las llamas acabaron con el campo que rodea la explotación, pero por suerte la estructura quedó intacta.

Tierra Moncayo es la marca con la que comercializará los huevos camperos que salgan de su granja, «con un sabor y un color diferente, debido al alimento que comen las gallinas y que recordará al sabor de antes» asegura Milagros.

La puesta en marcha del proyecto no ha sido fácil, la pandemia ralentizó el proyecto, los papeles y permisos también y finalmente la falta de recursos ha obligado a posponer su apertura, pero la ilusión de Milagros no fallece y ya piensa en que sus gallinas estén al aire libre esta próxima primavera.

Comparte tus comentarios
No hay comentarios
Dejar comentario: